Versión norteamericana de la película japonesa de 2003 del gran cineasta Takashi Miike, que obviamente resulta en un churro terrible. Sólo la vi porque soy un admirador de la belleza de Ana Claudia Talancón.
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| Título: Una Llamada Perdida (One Missed Call) |
| Año: 2008 |
| País: Estados Unidos |
| Director: Eric Vallette |
| Reparto: Shannyn Sossamon, Edward Burns, Ana Claudia Talancón, Ray Wise, Azura Skye, Johnny Lewis |
Varios jóvenes reciben una llamada en su celular en la cuál pueden escuchar el momento de su muerte. Beth se da a la tarea de averiguar lo que está sucediendo, antes de perder a su amigos o ella misma recibir la llamada.
De entrada la película japonesa es buena, pero no muy original, ya que retoma el tipo de horror ya plasmado en El Aro y La Maldición. Si a eso le agregamos que ésta nueva versión carece del ritmo de aquella y es mucho más lenta, tenemos una película que se arrastra a su conclusión.
Los sustos están basados en poner imágenes perturbadoras en momentos inesperados, pero que no tienen nada que ver con la premisa de la película. Todos los protagonistas, para variar, tienen actitudes inverosímiles y absurdas, que sólo contribuyen a que deseemos fervientemente que se mueran. El final, aunque trata de ser inesperado, resulta poco efectivo.
En fin, que Una Llamada Perdida sólo es recomendable para los muy, muy clavados en esta clase de cine. Yo de plano les recomiendo mejor la original.
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