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martes, 20 de noviembre de 2007

El Mundo Mágico de Terabithia

Hay películas, que por más defectos que les veas por todos lados, no puedes evitar decir que te gustaron. El Mundo Mágico de Terabithia es una de ellas.


Título: El Mundo Mágico de Terabithia (Bridge to Terabithia)
Año: 2007
País: Estados Unidos
Director: Gabor Csupo
Reparto: Josh Hutcherson, AnnaSophia Robb, Zooey Deschanel, Robert Patrick

Basada en una novela de finales de los 70's, narra la historia de dos jóvenes adolescentes inadaptados, que encuentran en su amistad una manera de sobrellevar las cargas que tienen en su vida. Como ambos cuentan con una gran imaginación, inventan un mundo de fantasía en donde puedan ser alguien más: Terabithia.

El primer obstáculo que tiene que librar el director Gabor Csupo, es el hecho de que toda la fantasía de la historia es producto de la imaginación de sus personajes. Por lo tanto, no puede abusar de los efectos especiales ni las secuencias de acción muy elaboradas, que tanto han llamado la atención del público en películas como Las Crónicas de Narnia, donde la fantasía es "real", o ni siquiera de lo que vimos en El Laberinto del Fauno, donde queda la duda si todo era real o imaginario. En Terabithia hay mucha fantasía, pero está "contenida" para no confundir al espectador. Esto favorece a la trama, pero desfavorece desde el punto de vista entretenimiento.

En la era de los videojuegos, los teléfonos móviles y los DVD, ya no hay mucho espacio para la imaginación, por lo que el mensaje de la película es importante, aunque quizá demasiado inocente.

La trama es buena pero por momentos pareciera alargarse de más; el ritmo no nos ayuda, y perdemos el interés en lo que pasa. Sólo los cambios inesperados en la trama nos permiten recuperar la frescura y seguir.

Las actuaciones son buenas, en particular la pequeña May Belle (Bailee Madison), quien se roba todas las escenas en las que aparece.

Otro aspecto en contra es que se trata de una película para niños, pero con un evento a la mitad del filme que resulta demasiado perturbador. Dramáticamente es efectivo, y le da una enorme fuerza al final haciéndolo tierno y emotivo. Pero eso sí, muy triste. Y no estoy seguro de que sea la clase de historia que los niños vayan a ver al cine.

Y sin embargo, el mensaje de amistad, la conmovedora historia, el impulso al uso de la imaginación como medio para que los jóvenes crezcan y la idea de que el conocimiento y la cultura pueden hacer la diferencia, son tan poderosos y rescatables que hacen que uno no pueda dejar de recomendar El Mundo Mágico de Terabithia a todos los jóvenes.

Inocente, emotiva y fallida, aún así es una película que termina ganándose al espectador.

viernes, 9 de noviembre de 2007

Leones por Corderos, una película para pensar.


Definitivamente las películas de este corte me agradan: políticos, militares y situaciones que invitan a la reflexión. Leones por Corderos aborda temas sobre la estrategia militar de Estados Unidos de los últimos tiempos. El título hace referencia a la cita hecha por un alemán sobre el ejército inglés, explicando que, si bien los soldados del Reino Unido eran feroces combatientes, sus altos mandos y estrategas los dirigían con pocas agallas y poco seso. Robert Redford (el director) hace analogía con el momento que vive el ejército nortemericano en sus recientes incursiones en Asia.

Uno puede estar o no de acuerdo con los posicionamientos del director sobre la política militar exterior nortamericana (un servidor no lo está), sin embargo, dentro del cine comercial hay pocas voces de crítica y desacuerdo y esto hace del largometraje un proyecto valiente y congruente con la trayectoria de Redford. Los diálogos están bien construidos y los personajes trabajados; las escenas, aunque estáticas, mantienen el interés constante en el espectador.

La manera de exponer los puntos de vista del director es a través de dos situaciones de debate o discusión que no concluyen del todo, permitiendo a la audiencia sacar conclusiones propias (lo que particularmente agradezco). Sin embargo los productores no pudiéron resistirse a incluir los estereotipos de guerra del cine gringo, donde los soldados son todo honor, todo entrega, toda humanidad, están dotados de nombre, familia y amigos; mientras que "el enemigo" no posee rostro, es poco más que un animal que lucha, con impulsos tribales y de absolutismo religioso, por la envidia que le causa modelo de vida occidental. Mucho me agradaría que los directores pensantes lograran trascender esto.


Nuevamente agradecemos la invitación que amablemente nos hizo Twentieth Century Fox a la presentacion del filme.